EVALUACIÓN

El terapeuta ocupacional mide el desarrollo de las habilidades motoras, de procesamiento sensorial, de auto-cuidado, de regulación emocional, de interacción y relación. Con los resultados desarrolla estrategias que promuevan la máxima participación diaria. 

La evaluación es un complejo proceso de observación del desempeño. Cómo el infante se sienta, camina o lanza una pelota y en ésta ultima acción: cuanta fuerza requiere para alzar la pelota y la velocidad que debe ejercer para el lanzamiento, si es a otra persona o a una canasta colgada en lo alto. El terapeuta mide su ejecución en relación a lo esperado en las habilidades motoras gruesas para su edad y desarrollo.

Para valorar las habilidades de motricidad fina el terapeuta centra su atención en tareas como escribir, cortar con tijeras, uso de utensilios para comer cuchara, tenedor, cuchillo, observa la coordinación que realizan sus dedos para sostener el cubierto o la fuerza ejerce en sujetarlo, también observa las habilidades que posee en atar sus cordones o subir la cremallera de la chaqueta.

El terapeuta ocupacional analiza las habilidades de procesamiento senso-perceptivo, cuanto tiempo es capaz de mantenerse sentado y atender instrucciones (alerta), se distrae fácilmente con los ruidos del ambiente (atención) o tiene dificultad para cambiar de estilo de ropa (discriminación táctil). Realiza un examen exhaustivo de las respuestas que el infante da ante los estímulos auditivos, visuales, gustativos, olfativos y hay tres sistemas a los que presta mayor importancia vestibular, propioceptivo y táctil por su relevancia para el correcto funcionamiento del sistema nervioso central y de su desarrollo. 

El abordaje Holístico ofrece al terapeuta ocupacional diversos enfoques y técnicas que cuentan con sus propias evaluaciones y medidas del desarrollo, evolución y crecimiento del infante. Utiliza el razonamiento clínico para contrastar los resultados obtenidos y los datos solicitados a la familia, datos observados en sala por el terapeuta y los datos esperados para la edad cronológica o corregida. Realiza un estudio para determinar los apoyos o estrategias más apropiados. 

INTERVENCIÓN

Cada infante y cada familia son únicos e irrepetibles, nuestro modelo Holístico se adapta a la dinámica familiar y entorno real.

Promovemos aprendizajes basados en el esfuerzo personal del infante, guiado por el Terapeuta Ocupacional quien parte del refuerzo positivo y la resiliencia (capacidad de adaptación) para ajustar las demandas y retos acordes a las potencialidades y desafíos actuales del infante.

Cada reto, se acompaña de un logro, la motivación intrínseca es el motor del éxito del infante, creada a partir de la alianza terapéutica y un entorno especialmente diseñado. Las tareas, actividades o juegos están planificadas y creadas respetando la individualidad del infante, ritmo de aprendizaje, preferencias, tiempo de atención, tolerancia al esfuerzo…

Se programa la intervención/abordaje, desde una perspectiva Holística, los objetivos, metas y logros se ajustan a las inquietudes de los padres y necesidades actuales del infante, contemplando los resultados de las evaluaciones, criterios pedagógicos, terapéuticos y socio-emocionales que promuevan la máxima autonomía y bienestar individual y familiar.

COORDINACIÓN

Conocer el desempeño del infante en los diferentes entornos y ambientes naturales en los que se desarrolla, posibilita su potencial para el cambio. 

• Colegios públicos, privados y concertados. 
• Servicios públicos (CDIAP, EAP, IES, CSMIJ, EAIA)
• Centros privados
  • Centro de re-educación
  • Logopedas
  • Fisioterapeutas
  • Psicólogos
  • Neurólogo
  • Pediatra
  • Otros

Un trabajo global requiere la participación de los agentes implicados, para alcanzar cambios sustanciales en el desarrollo del infante resulta beneficioso conocer que ocurre en otros ámbitos y espacios de convivencia. Por ello visitamos la escuela, si es posible el aula, el patio y los espacios comunes, ofrecemos estrategias y recursos a los docentes, profesionales psico-pedagógicos a la vez que apuntamos las necesidades que son prioritarias a trabajar y pueden llevarse a cabo en CENTIR. 

ACOMPAÑAMIENTO

Cada infante y su familia son únicos. Con herramientas estandarizadas, basadas en la evidencia científica actual damos respuesta a las inquietudes que los padres, profesores o profesionales que conocen al infante, ofreciendo una perspectiva diferente. 

Aceptar la realidad, tal cual es. El equilibrio del núcleo familiar como punto de partida para sugerir apoyos, estrategias o cambios. Orientar y guiar cuando sea necesario.
Descubrir intereses, motivaciones y anhelos. Unir esfuerzos para descubrir las verdaderas posibilidades que nos aportan las circunstancias actuales. 

Escuchar miedos, dudas y cuestionamientos. Los padres conocen al infante mejor que nadie, sus preocupaciones tienen fundamento, sentir sus vivencias les permite sacar los miedos y resolver dudas. 

Aportar experiencias positivas. Que permitan comprender, aceptar y continuar con los procesos del desarrollo y crecimiento del infante. 

Estar presente sin juzgar. Percibir las fortalezas y debilidades de los padres y transformarlas en potencialidades para acompañar al infante en su desarrollo. 

PROGRAMAS DE INTERVENCIÓN

Planificar: ordenar en pasos pequeños aquello que nos queda grande.

•  “yo puedo solo…”
  • • Programa de autonomía personal y de la vida diaria
  • Orden
  • Planificación
  • Secuenciación
•  “Manos a la obra”
  • • Programa de aprendizaje significativo
  • Handwriting
  • Motricidad fina
  • Lectoescritura
  • Atención
  • Funciones ejecutivas
  • Comprensión
•  “Inspira, respira y expresa”
  • • Programa habilidades sociales y emocionales
  • Comunicación e interacción (asertividad)
  • Resolución de problemas (ajustar las demandas al entorno)
  • Identificar y expresar emociones propias y ajenas (empatizar)
  • Asumir roles, entrenar la espera, respetar al prójimo.
  • Relajación y autocontrol.
• Paso a paso!
  • • Intervención individual, exploración y uso del material.  
  • Autorregulación
  • Estrategias para comprender las sensaciones
  • Organización procesamiento sensorial
  • Aprender a utilizar los sentidos (visual, táctil, gustativo, olfativo, auditivo, interoceptivo, propioceptivo y vestibular)
  • Equilibrio y coordinación motora (praxis y planeamiento motor)
  • Flexibilidad y adaptación a cambios de rutinas y referentes
• «Master’s Chef»
  • • Intervención especifica en problemas de alimentación. 
  • Comer o alimentarse?
  • Puedo jugar con la comida?
  • Come antes y solo! O Todos a la mesa!
  • ¡Fuera trozos, nada verde y solo papillas!